«Con Brazos Abiertos»

«Con los Brazos Abiertos»

Por: Reynaldo Quintanilla.

Sientes que algo te hace presión en el pecho junto con una ansiedad que deseas que las cosas terminen ya. Pensamientos que giran alrededor de nuestra mente que nos convierten en personas distantes a la realidad. Así es el momento en que los afanes, las preocupaciones y las pruebas que vienen a nuestra vida vienen asfixiar los momentos del día con día, los planes hasta incluso nuestras metas.

Tal vez usted ha pasado la contradicción de que nuestros planes dieron otro rumbo inesperado. Habíamos decidido llegar a una universidad anticipadamente, pero no pudimos. Habíamos soñado con un trabajo muy bueno pero la hora de nuestra oportunidad se fue al borde. Queríamos viajar a un lugar programado y esperado pero no llegamos. Tal vez  esperamos respuestas buenas sobre nuestros planes, pero las cosas se tornaron difíciles y ahora estamos  en el lugar   donde estamos,  haciendo algo que no imaginamos o no pensamos que ocurriría y nos preguntamos ¿Y Ahora que Dios? No entiendo.  Un ex- compañero  del seminario donde estudie al contarme la experiencia que esta viviendo me decía esta semana: “hay que esperar la voluntad de Dios con los brazos abierto”.

Antes de llegar al seminario donde hace unos meses atrás culmine mis estudios. Recuerdo pasar un tiempo difícil después de haber salido  graduado de mi bachillerato en El Salvador. Desde adolescente deseaba estudiar en un seminario Bíblico, pero el proceso se complico. Había decidido después de graduarme irme para un seminario en Guatemala. Las puertas se cerraron, mi oportunidad pasó, y no entendía porque yo me encontraba en la universidad estudiando Mercadotecnia y Licenciatura en traducción del idioma ingles, cosas que ni por cerca pasaban en mi mente hacer. Aparte era y todavía soy malo para las matemáticas y para idiomas. Pero que cuando siempre quise prepararme para servirle a Dios y  todavía no era el tiempo. Pero después de un largo proceso Dios me trajo a Estados Unidos a prepararme bíblicamente. A Él sea la gloria!

En realidad da tristeza, frustración, desanimo e incluso dolor situaciones de este tipo o aun peores. No entiendo aun porque estudie esas materias en la Universidad, pero lo único que entiendo es que Dios me estaba capacitando y preparando para un lugar donde fuera su grande, hermosa, perfecta y divina voluntad.

“Hazme oír por la mañana tu misericordia, Porque en ti he confiado; Hazme saber el camino por donde ande, Porque a ti he elevado mi alma.”(Salmos 143:8)

El Ser humano siempre ha intentado llevarle la contraria a Dios. Pero para el cristiano vivir bajo la perspectiva de su voluntad es embarcarse a una aventura, que le da sentido a nuestra vida. Le da ese toque fino  de poder experimentar cosas nuevas. Por eso  es que con brazos abiertos esperemos lo que él quiere para nosotros. Y si ya esta experimentando lo difícil de entender su situación. Abrace con fuerza la voluntad de Dios hasta que se termine enamorando de ella.

El comprender la voluntad de Dios esta basado en que Él no es el que cause todo lo que sucede lo dificil en nuestra vida, mas bien en su soberanía Él permiten que pasen o no las cosas. Pero nuestro propósito principal es cumplir su voluntad según Romanos 12:1-2 que habla de esta verdad.

“El hacer tu voluntad, Dios mio, me ha agradado, y tu ley esta en medio de mi corazón” (Salmos 40:8)

El decir estas palabras como el salmista, no son nada fáciles, si  en realidad el hacer su voluntad no era lo que esperábamos. David pudo abrazar su voluntad y no solo por las experiencias que vivía, sino también al cumplir su palabra.

Lógicamente, la Biblia no me dice, que trabajo tengo que tomar, o que carrera comenzar en la universidad etc… Pero si la Biblia nos da estándares y pautas de como vivir la vida Cristiana que le agrade a Dios, más bien ella nos da principios que cambien nuestro estilo de vida. Agradarle a Dios con nuestro andar diario es parte también de hacer su voluntad y aun para ello necesitamos tener los brazos abiertos. Si la palabra de Dios dice que para agradar a Dios y hacer su voluntad con mi vida debo dejar las amistades que no me edifican, cambiar mi forma de hablar, mi forma de vestir, debo leer su palabra, debo asistir a la iglesia etc. Recibiré con los brazos abiertos lo que Dios me pide cambiar a través de su palabra si o si.

Si usted  esta experimentando esa sensación de no entender porque Dios en su soberanía cambia nuestros planes. Empiece a abrazar su voluntad, conozca que Dios es un Dios que cambia lo bueno por lo mejor. Pero que Dios también quiere trabajar en nuestras vidas aun por medio de estas situaciones. Dígale a Dios: “Señor recibiré tu  voluntad con los brazos abiertos” “Puede que no me guste” Pero aun así la abrazare hasta que entienda y pueda confiar en ti”

“Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud. Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; Por tu justicia sacarás mi alma de angustia” (Salmos 143:10-11)

Querido lector. Debido a la cantidad de personas que leen este devocional.Cualquier comentario que usted tenga por favor hacerlo, al final del blog. Me gustaría saber si esta siendo de bendición estos devocionales. Muchas gracias!…

 

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